Hondo pesar ha causado el fallecimiento de Angélica Mendoza Almeida de Ascarza, conocida como «Mama Angélica», fundadora de la Asociación Nacional de Familiares de Secuestrados, Detenidos y Desaparecido del Perú (Anfasep), cuando tenía 55 años.
Viajó a la ciudad de Lima para estar presente en la sentencia del caso Los Cabitos (17/08/17), delicada de salud a pesar de ello mostraba fortaleza para encontrar justicia. Madre y luchadora social que buscó por más de 30 años a su querido hijo Arquímedes Ascarza en las fosas con cuerpos mutilados y tocar puertas de instituciones que debían prestar justicia. Ningún gobierno tuvo la decencia de atenderla como debía ser, solo fue utilizada para las fotos de los políticos de turno.
Mujer decidida para concretar la fundación de la Asociación Nacional de Familiares de Secuestrados y Desaparecidos del Perú (ANFASEP) y en la creación del comedor para alimentar a los niños que quedaron huérfanos a causa del conflicto armado interno que sufrió el país durante 20 años.
La mayor parte de su vida pasó buscando a su querido hijo Arquímedes sin encontrarlo , su amor de madre fue mucho más que el temor. Enfrentó los maltratos y amenazas, pero nunca dejó de buscar justicia y verdad.
En el año 2012 recibió la Medalla de la Defensoría del Pueblo, en reconocimiento a su incansable labor en la promoción social y defensa de los derechos humanos y la búsqueda de de los desaparecidos.
Su contribución y esfuerzo no ha sido en vano, porque fu determinante para la adopción de políticas en materia de justicia, verdad y memoria.
No se puede describir con palabras el dolor que han sufrido y sufren en la actualidad las víctimas de la violencia política.
Muchos familiares, después de la desaparición y asesinato de sus seres queridos, han preferido guardar silencio y levar la cruz dentro de sí. Pero las mujeres, como Angélica Mendoza al frente da la ANFASEP optaron por luchar en busca de verdad y justicia a pesar de las grandes limitaciones y fueron reconocidas no solo en el país sino en el extranjero. Es la historia de las “mujeres imprescindibles” en palabras de Bertolt Brecht
Mama Angélica siempre manifestaba que quería morir encontrando a su hijo, pero se fue sin haberlo encontrado.
Queda para el tiempo su imagen y ejemplo de lucha tenaz a través de la ANFASEP rechazando la impunidad y buscando la verdad y justicia.